[Ivan & Vicky] Ojalá algún dia te des cuenta de que existo - Relatos de Miyoko( Historia en el Internado)
   
 
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CAPITULO 1


Iván está sentado en el tejado, con la mirada perdida, las lágrimas caen de sus ojos mientras recuerda las últimas palabras de Toni. Ha pasado varias semanas y no le ha contado a nadie lo que descubrió aquel día. Vicky lleva un rato mirándolo, desde abajo, sin atreverse a ir a su lado… pero presiente que está mal y quiere ayudarlo, así que se dirige hacia el desván para subir junto a él.

En el tejado:

- Vicky: Bonito paisaje…

- Iván: ¿Qué quieres?

- Vicky: ¿Yo? Disfrutar de las vistas.

(Iván mira a Vicky que le sonríe tímidamente)

- Vicky: En serio Iván, llevas días sin hablar con nadie, andas pensativo, no sueltas ninguna de las tuyas…que te pasa?

- Iván: Nada

- Vicky: Iván sabes que te conozco mejor que muchas personas, y sabes que puedes confiar en mi, cuéntamelo.

- Iván: Friki que te pires de aquí, a ver cuando te enteras de que no quiero nada contigo y te olvidas de mi de una vez.

- Vicky: Eres un idiota Iván, no sé ni por qué me molesto. Ya te dije que hace mucho que paso de ti, pero ¿somos amigos no? Creía que nos quedaba la amistad, y entre amigos se ayudan, pero ya veo que ni eso te mereces.

(Vicky hace el intento por levantarse e irse, pero Iván la agarra)

- Iván: No te vayas por favor.

- Vicky: No soy masoquista Iván, no me gusta que me traten mal.

- Iván: Lo siento, sé que no tienes culpa pero es que estoy mal.

- Vicky: Es por Julia? He notado que llevas días muy distante con ella, no seas idiota, no te las des de chulo, si la quieres de verdad demuéstraselo o la vas a perder.

- Iván: No, no es Julia, se trata de…

- Vicky: De qué? Dice Vicky mientras Iván le sujeta la mano.

- Iván: Por qué Vicky? Por qué te preocupas tanto por mi si no me lo merezco?

- Vicky: Porque yo te…. Dijo Vicky flojito y tímidamente.

- Iván: Por qué tu me que? Dijo rápidamente sin dejarla terminar.

- Vicky: Porque te quiero Iván, porque sé que has sufrido mucho y que toda tu dureza y chulería son solo apariencias, porque solo sé que solo quieres que te quieran y yo no puedo evitar hacerlo, me duele todo lo que te duele a ti, si tu sufres yo sufro, porque deseo tu felicidad aunque no sea a mi lado, dice Vicky entre lagrimas.

(Iván la mira embobado y se acerca a ella para secarle las lagrimas y siente un gran impulso de besarla, se acerca a ella pero Vicky lo rechaza)

- Vicky: No lo hagas. No volveré a permitirlo. No volveré a sufrir, no quiero más migajas de tu amor ni tampoco volveré a traicionar a una amiga, no cometeré el mismo error dos veces, Julia no se lo merece.

CAPITULO 2

 

Vicky estaba en la biblioteca, necesitaba estudiar para aprobar si no quería perder su beca. Intentaba concentrarse en los libros, pero la conversación con Iván aun continuaba rondando por su cabeza.

- No debería haberle dicho a Iván que aún estoy enamorada de él, soy una bocazas decía Vicky mentalmente. Pero él…él quería besarme, ¿será que él también me quiere? Puede que este confundido y que en el fondo el me…no Vicky! Deja de pensar eso. No te quiere, siempre te utiliza cuando está mal, no seas más su paño de lagrimas, no seas más el segundo plato de nadie. Pero es que me apetecía tanto besarlo, hace ya más de 3 años que no siento sus labios sobre los míos, pensaba Vicky mientras acariciaba sus labios. Pero hice bien, no podía dejar que me besara, él está con Julia y ella es mi amiga. No la puedo traicionar como hice con Carol, no quiero volver a fallarle a otra amiga, me lo prometí.

- Pero bueno, ¿estás conmigo o estás con ella?

El grito de Julia saca a Vicky de su ensimismamiento. Allí, apenas a unas mesas de distancia estaban Julia e Iván. Vicky estaba tan ensimismada que no se había percatado de su presencia. Su mirada se cruza con la de él y luego vuelve a los libros, no quería entrometerse en lo que ellos hablaban.

- Iván: ¿Qué pasa Julia?

- Julia: ¿Cómo que qué pasa? Llevo un rato hablándote y no me haces caso.

- Iván: Lo siento, estaba concentrado en el tema.

- Julia: ¿y tú te crees que yo soy tonta? He visto como la mirabas, no has dejado de hacerlo desde que hemos llegado.

- Iván: Anda ya Julia. Yo no estaba mirando a Vicky.

- Julia: ¿Ah no? ¿Y como sabes tú que me refería a ella si según tú no la estabas mirando?

(Iván calla, no sabe que contestar)

- Julia: No soy idiota Iván, además ayer os vi en el tejado.

- Iván: Es que…

- Julia: Es que nada, no me vengas con excusas, dime que pasa entre vosotros.

- Iván: ¿Y a ti que te importa Casper?

- Julia: Claro que me importa, se supone que estamos juntos, ¿no? Quiero saber que hacías entonces con otra chica.

- Iván: Charlábamos Julia, somos amigos, ¿no? Es lo que hacen los amigos, nos contábamos cosas.

- Julia: ¿qué cosas?

- Iván: J_ _ _ r tía, ¡cómo rallas! Lo que estábamos hablando no es asunto tuyo.

- Julia: Muy bien, si no me lo dices tú me lo dirá ella.

Julia se levanta rápidamente y decidida se encamina hacia la mesa de Vicky, a Iván no le da tiempo ni de detenerla.

- Julia: Vicky, necesito hablar contigo, acompáñame.

- Vicky: Ahora mismo no puedo, espera que termine de estudiarme este te…

- Julia: No. ¿Es que no me escuchas? Necesito hablar contigo ya, es importante.

- Vicky: Primero te relajas guapa y luego hablamos, que yo no te he hecho nada.

- Julia: Vicky!!!

- Vicky: Jo, que pesada!!! Está bien, vamos a hablar.

- Julia: acompáñame al baño.

CAPITULO 3

 


Julia camina ligera, delante de Vicky sin dirigirle la palabra. Vicky camina tras de ella, temiendo que el tema de la conversación sea de Iván. Iván las observa, va detrás de ellas, y espera a que entren al baño para acercarse más a la puerta y poder escuchar que dicen.

- Vicky: Bueno ya estamos aquí, ¿qué quiere?

- Julia: ¿Qué te traes con mi novio?

- Vicky: ¿con Iván?

- Julia: claro que con Iván, o cuentos novios crees que tengo?

- Vicky: es que no sé a que te refieres, con Iván no me traigo nada.

- Julia: No me mientas Vicky. Ayer te vi con él.

- Vicky: Sí, y qué? Somos compañeros y amigos desde hace muchos años, es normal que hablemos, no?

- Julia: En el tejado? Los dos solos?

- Vicky: En el tejado o donde sea, o es que nos hace falta carabina?

- Julia: No te hagas la graciosa. No quiero que te vuelvas a acercar a él.

- Vicky: pero que dices Julia!!!

- Julia: Lo que has oído. Que no te le acerques!!!

- Vicky: No te entiendo Julia, de verdad. Ha podido estar conmigo, solo con llamarme hubiese corrido a sus brazos pero no, está contigo, te quiere a ti y no a mi. Por qué no te preocupas mejor de lo que le pasa a él y dejas de preocuparte por mi? Está contigo no? Y eso es porque quiere nadie lo obliga, no se porque te pones así.

- Julia: Como que me preocupe de lo que le pasa a él, qué le pasa?

- Vicky: y me lo preguntas a mi? Tu eres su novia, deberías haberte dado cuenta.

- Julia: Cuenta de qué?

- Vicky: de que está mal, que lleva días que apenas habla con nadie, está distraído, triste, ni siquiera le dice enano a roque! Apenas come y se pasa gran parte de la noche en el baño, sentado fumando.

- Julia: Y tu utilizas todo eso como excusa para acercarte a él. Valiente amiga!!

- Vicky: No es justo que me digas eso Julia no me lo merezco. Si yo me he dado cuenta es porque lo conozco mejor que muchas personas, y porque lo he observado, tú también deberías haberte dado cuenta. Pero no, estas más preocupada porque me acerque a él que por él y encima me dices mala amiga, si yo fuera mala amiga ayer yo…

(Vicky calla al darse cuenta que por su calentón estaba a punto de decirle a Julia que Iván intentó besarla ayer)

- Julia: Ayer tú que?

- Vicky: Ayer nada Julia.

- Julia: Vicky, dime que pasó ayer!

- Vicky: No pasó nada Julia, lo vi mal y me acerqué a él por si necesitaba desahogarse con alguien, hablamos un rato y ya esta!

- Julia: Tu lo quieres verdad, sigues enamorada de él?

- Vicky: Eso no importa, está contigo, él te quiere a ti.

- Julia: Pero sigues enamorada de él, con más razón…no vuelvas a acercarte a MI novio, te queda claro?

- Vicky: Sí Julia si, me queda claro, podrás prohibirme que me acerque a él, tal vez tengas derecho a hacerlo, pero no puedes prohibirme que lo quiera que me preocupe por él. (Vicky comienza a llorar) Podrás alejarme de él, pero no puedes hacer que lo olvide. Mis sentimientos continuarán ahí, han estado ahí ocultos durante mucho tiempo, viéndolo con mi mejor amiga y teniendo que tragarme lo que sentía. Siempre lo he querido, y lo he querido bien, me ha dolido cada desengaño, cada pena que ha tenido, he llorado cada lágrima suya y he festejado y compartido cuanta cosa buena pasaba en su vida. Ahora sé que está mal, y respetaré tu deseo y no seré yo la que vaya a él, pero sí él me necesita estaré a su lado. Sé que no puedo ser en su vida lo que a mi me gustaría, pero seré su amiga siempre y le ayudaré a alcanzar su felicidad, aun sin ser a mi lado, aun pudiendo ser su felicidad mi desdicha.

(Iván tras la puerta tiene un gran opresión en el pecho, siente cada palabra que dice Vicky, y aunque las lagrimas no brotan de sus ojos las siente correr en su corazón, por su cuerpo, por su sangre, y no entiende que le ocurre solo sabe que en ese momento entraría y abrazaría a Vicky, la abrazaría tan fuerte que se fundirían en una sola persona).

- Julia: Muy bonito, pero lo siento, él está conmigo, me quiere a mi, y la que tiene que ayudarlo y estar a su lado soy yo.
(Julia se encamina hacia la puerta dando por zanjada la discusión)

- Julia!!! Dice Vicky antes de que ésta salga por la puerta. Julia se vuelve para ver que quiere Vicky.

- Vicky: Deja de preocuparte porque yo pueda quitártelo y quiérelo, ayúdalo, preocúpate no de perderlo, sino de que no desee apartarse de su lado en lo que le quede de vida.

CAPITULO 4


Iván está echado en la cama, no puede dejar de pensar en Vicky, sus palabras resuenan en su cabeza una y otra vez, le estremecen… pero lo que más le inquieta es no saber que siente, por qué desea tanto correr al lado de Vicky y abrazarla. De pronto siente como alguien se tumba a su lado. Julia está ahí, a su lado, con un bonito y sexy camisón negro, lo mira insinuante e Iván le sonríe, mientras se hecha sobre ella para besarla. Lo hace apasionadamente, pero de pronto viene a su mente las imágenes de aquella noche, Toni, su padre muriendo ante él, y aunque sabe que Julia no es culpable no puede evitar sentir como si lo fuera. Sabe que él se portó mal, fue un idiota pero ella… ella no tenía que haber ido a pesar de eso, pero lo hizo, se fue con él y por eso él tuvo que ir a buscarla y Toni a buscarlo a él y por salvarlo, perdió la vida. Siente dolor por su muerte, pero sobre todo rabia, una gran rabia por lo que le dijo, ellos, María y Toni son sus padres, los yonkis que lo vendieron, Tony se portó tan bien con él y María… le contó tantas cosas…y ella no se lo dijo, incluso dejó que creyera que su madre era otra persona… De pronto se detiene, no puede besar a Julia, siente un gran rechazo…trata de controlarlo, pero no puede, no puede perdonarla, no puede perdonarla a pesar de saber que no es culpable.

Julia: Pero qué te pasa?

Iván: No me apetece.

Julia: Que no que? Me estás rechazando?

Iván: Vete de aquí Julia, quiero estar solo…

Julia: Pero…

Iván: Que te pires a buscar algún fantasma Casper!!!

Julia se levanta de la cama, se apresura a salir de la habitación y da un fuerte portazo, está tan enfadada…se dirige al baño, allí se sienta, y comienza a recordar como Iván la miraba antes, como la besaba, como la abrazaba… no comprende por qué ahora la rechaza. Las lagrimas comienzan a rodar por su mejillas y de pronto, como de la nada aparece frente a ella una mano que le ofrece un clínex . Es un idiota dice mientras se lo ofrece. Julia levanta la mirada y allí frente a ella está Roque que le sonríe dulcemente.

Julia: Que haces aquí?

Roque: Te vi entrar aquí y sabias que estabas mal…quería ver que te pasaba, pero me lo imagino…

Julia: Ah si?

Roque: Sí, es un idiota, pasa de él…

Julia: No puedo Roque, deseo más que nada estar a su lado…me hace falta como el aire que respiro…

Roque: Tanto lo amas?

Julia: Amor? No sé si es amor, a veces dudo que lo sea…es deseo, es pasión… es como enfrentarme a mi misma, nos parecemos tanto…

Roque: No te merece, no sabe lo que tiene…

Julia: y que tiene según tú?

Roque: Una chica preciosa, valiente, simpática, generosa…ojala yo…

Julia: Ojala tu qué? (Julia mira dulcemente a Roque)

Roque: Ojala yo fuera él, ojala me quisieras como lo quieres a él…

Julia sonríe, nadie la trata con tanta dulzura como Roque, él la hace sentir especial, nadie la mira como él, él la mira con amor y no con deseo…él hace que ella se sienta querida y no deseada y le gusta esa sensación. Lo mira intensamente mientras le sonríe y poco a poco se acerca a él, desea besarlo, desea sentir como es que te besen por amor, con dulzura, con sentimiento y no por arrebatos de pasión, y así sus labios se unen en un beso furtivo cargado de sentimientos, ternura y cariño…

CAPITULO 5


Aquella noche Vicky no podía dormir, sentía una fuerte opresión en el pecho. Su corazón gritaba a pleno pulmón el nombre de Iván, pero su mente se empeñaba en silenciar el grito.
Sentada allí fuera mirando las estrellas recordaba como fueron las cosas tiempo atrás, cuando tuvo algo con Iván, algo prohibido que a pesar de haber visto la luz, solo Iván y ella conocían toda la historia, su historia de amor. Vicky siempre había pensado que esa historia era solo suya, que le pertenecía, pues cree que ella fue la que más dio; arriesgó su corazón y su amistad con Carol y acabó perdiendo. Ella fue quien más sufrió, sufrió por enamorarse del novio de su mejor amiga, por perderlo y por haberla traicionado. Por eso Vicky guarda su historia en una cajita de cristal forrada por dentro de terciopelo para proteger sus recuerdos, y aunque muchos creen ver desde fuera lo que guarda en su interior, solo ella conoce el contenido.

Iván la ha visto desde la ventana. Está ahí, sentada en el mismo lugar donde Carol le rompió el corazón aquella noche que lo dejó, pero no es eso lo que viene a la cabeza de Iván. No piensa en Carol, solo Vicky ocupa en ese momento su mente, y sin pensárselo dos veces coge una chaqueta y va a su encuentro.

Silencioso camina hacia ella y cuidadosamente le deja caer su chaqueta sobre sus hombros. Vicky lo mira un instante, y rápidamente vuelve a mirar las estrellas; El cielo está tan estrellado esa noche…que Vicky no puede dejar de admirar las estrellas. Ella desearía ser una de esas estrellas, no estar más a la sombra y brillar con tanta luz propia que no pudiera pasar desapercibida por Iván

Iván: Bonita noche, pero hace un poco de frío. Qué haces aquí sola?

Vicky no le contesta. Piensa que si no le habla se irá; Iván es tan orgulloso que nunca le rogaria a nadie por eso es mejor hacer como si no estuviera, su orgullo lo haría marcharse y así se evitaría problemas con Julia.
Iván: Vicky!!! (Espera unos segundos a que ella le conteste)
Iván: Sé lo que te pidió Julia pero si crees que me voy a ir estás equivocada.
Vicky: Pedir? Me lo exigió.
Iván: Lo sé, pero no tienes que obedecerla. Ella no es quien para dirigir nuestras vidas.
Vicky: Es tu novia.
Iván: Bueno…no exactamente. Tenemos algo, pero no le hemos puesto nombre a nuestra relación.
Vicky: Lo que tu digas…
Iván: Mi ángel...necesito que hablemos.

Vicky lo mira sorprendida. Hace tanto que no la llamaba así…desde aquellos tiempos pasados. Decía que ella era su ángel, porque cuando estaba a su lado lo llevaba en sus alas a un lugar donde era feliz y no sentía miedos, tristezas ni dolor.

Vicky: No me llames así.
Iván: Lo siento, no pensé que te molestaría, me salió sin darme cuenta. Será porque no sabes cuanto deseo que me lleves en tus alas como antes, que lleves a ese lugar que construías para mi donde no recordaba mis problemas ni sentía tristeza ni miedo. Por eso quiero contarte lo que me pasa, sé que solo tu puede hacer que me sienta bien. Ayúdame a alcanzar la paz que necesito y que solo hallo a tu lado. Me lo vas a negar?

Vicky: Jamás te negaré mi ayuda Iván. Cuéntamelo, sabes que estoy aquí para lo que necesites.
Iván: Se trata de mi padre
Vicky: Noiret?
Iván: No Vicky. Hace poco descubrí que no soy hijo biológico de Noiret.
Vicky: Eres adoptado? Bueno, que tiene eso de malo?
Iván: No exactamente. Me compraron, como se compra un muñeco en una juguetería.

Vicky no puede creer lo que escucha. Mira a Iván y se acerca más a su lado, se agarra a su brazo con fuerza y deja caer la cabeza sobre su hombro. Quiere que sienta que está a su lado y puede contar con ella.

CAPITULO 6

 


Iván: Mis verdaderos padres eran unos yonkis que me vendieron por un chute.

Vicky: Por un chute? (Cada vez está más sorprendida, a penas puede creer lo que Iván le cuenta).

Iván: Sí, por una mierda de chute. Hasta hace poco solo sabía eso y que eran muy jóvenes cuando me tuvieron, la mujer que me tuvo solo tenía 13 años entonces.

Vicky: Desde cuando sabes eso?

Iván: Qué más da eso…lo que importa es lo que he descubierto ahora.

Vicky: Qué has descubierto?

Iván calla, no se atreve a contarla a Vicky que es hijo de la chacha y el limpia chimeneas, pero sabe que puede hacerlo, ella también tiene unos orígenes humildes.

Vicky: No te calles ahora Iván. Sigue. Desahógate. Estoy aquí contigo. Te escucho, te apoyo totalmente.

Iván: Mis verdaderos padres son Toni y María.

Vicky: Que qué?

Iván: Sí, son ellos. Toni me lo contó antes de morir.

Vicky: Y murió aquella noche, cuando fue a rescataros a Julia y a ti. Iván!! Dio su vida por salvar la tuya, no le guardes rencor, perdónalo!!

Iván: Es que no entiendes Vicky? Me vendieron como a un trasto que no querían, que les estorbaba y por culpa de eso he vivido un infierno, el infierno que Noiret creó para mí.

Iván llora y Vicky se agarra a él con más fuerza todavía.

Vicky: Pero María vino, vino a buscarte! Con razón se preocupaba tanto por ti. Con razón te demostraba tanto cariño desde el primer día.

Iván: Sí, pero me engañó. No me dijo quien era. Incluso cuando yo le conté que sabía que era el hijo que unos yonkis vendieron o cuando vino esa mujer que seguramente Noiret contrató para que se hiciera pasar por mi madre, María calló, dejó que creyera una mentira. Ella prefería que pensara que otra mujer era mi madre cuando realmente lo era ella y estaba ahí, tan cerca de mi.

Vicky: Iván no la juzgues.

Iván: Como que no Vicky? No solo me vendió sino que luego se acercó a mi con mentiras, ocultándome la verdad, dejando que creyera cosas que no eran ciertas.

Vicky: Habla con ella Iván. María es una gran mujer, luchadora, fuerte, buena…tu estás seguro de todo? Sabes si es verdad lo que te han contado? Habla con ella, deja que te cuente su historia, dale una oportunidad.

Iván: Pero…

Vicky: Pero que Iván? Creo que te estás precipitando. Estás sacando ideas precipitadas, no la condenes aún, primero escúchala. Deja que te cuente que ocurrió, que te de un por qué de aquello. Tienes la oportunidad de empezar de nuevo, tienes ahí a tu madre! Que si vino hasta aquí es porque te quiere y te lo ha demostrado muchas veces. Nunca has sabido lo que es tener una familia que te quiera que se preocupe por ti y ahora tienes esa oportunidad. No la desaproveches.



Iván escucha atento los consejos de Vicky. Llora sin cesar mientras piensa que tal vez ella tenga razón y que debería hablar primero con María pero siente tanta rabia, tanto dolor…que no le permite acercarse a ella.
Iván agacha la cabeza y mira a Vicky, que está ahí agarrada s su brazo con la cabeza sobre su hombro, y así, con ella a su lado, se siente más fuerte para enfrentar las cosas. Iván la abraza fuertemente, como si deseara fundirse con ella y que no volviera a separarse de él.

CAPITULO 7

 


Roque estaba en su cuarto, sentado frente a su portátil buscando información par aun trabajo de historia. De pronto deja de teclear, fija su mirada en la pantalla y se deja caer sobre el respaldo de la silla. Allí frente a él, de fondo de pantalla tiene una foto con su mejor amigo, Caye, y no puede evitar derramar alguna lágrima mientras lo recuerda. Lo echa tanto de menos…habían pasado juntos tantos años que ya más que amigos eran como hermanos. Para Roque Caye era esa persona que se sabía de memoria la melodía de su corazón y se la tarareaba cuando la había olvidado, la que le recordaba quien era él cuando lo olvidaba, la que le servía de bastón para que se apoyara en él cuando estaba cansado, la que le tendía una mano para ayudarlo a levantar cuando había tropezado. Caye era aquella persona que aún sabiéndolo todo de él, era su amigo.
En ese momento a Roque le gustaría tenerlo ahí para contarle lo de Julia. Se había enamorado de verdad por primera vez, pero Iván, sabiéndolo, se la había quitado por la espalda. No le fue de frente, lo negó todo hasta que fue descubierto.

Roque piensa que a Caye le hubiese caído bien Julia, claro que sí, si incluso acudió a ella pidiéndole ayuda y ella lo hizo, lo ayudó a que su alma descansara en paz. Pero también sabe lo que él diría de lo que había pasado entre ellos, de aquel beso. Caye hubiese dicho que a las novias de los amigos ni se las mira ni se las toca, porque las chicas vienen y van pero los amigos de verdad perduran. Diría que no debemos pelear por una chica ni traicionar a los amigos. Pero Roque no siente lo que ha hecho, no siente que haya traicionado Iván. Fue Iván quien lo traicionó a él, y no solo a él, también a Caye. Iván se lió con Vicky sabiendo que Caye estaba loco por ella, y también se lió con Julia sabiendo lo que significaba para él y en ambos casos lo hizo furtivamente, sin dar la cara.

Roque siente que Iván le quitó a Julia. Es consciente de que no tenía nada con ella, pero Iván sabía que estaba enamorado de ella, y le falló, se lió con Julia. Si lo hubiese hecho de otra manera, si le hubiese dicho que se había enamorado de ella y que ella también lo quería…él lo hubiese comprendido, en el corazón no se manda. Pero no, se lió con Julia a escondidas, por eso Roque siente que Iván lo traicionó y debido a eso no puede lamentar lo que sucedió, no puede sentir que traicionó a Iván. Sí, Julia y él se besaron pero no se arrepiente, no se siente culpable y lo volvería a hacer, porque él si la quiere de verdad.

CAPITULO 8

 

 


Julia está sentada en su cama. Hojea un libro que tiene entre sus manos mientras piensa en Iván. Ella se cuestiona qué es lo que siente por él. A veces piensa que está enamorada, que haría cualquier cosa por no perderlo, que sus labios son el alimento que necesita para vivir. Otras sin embargo pensaba que no era amor, ¿Cómo iba a estar enamorada de él? Nunca la había tratado bien, nunca le había dicho que la quería, nunca le había dado una caricia, un abrazo…No, lo suyo era algo más pasional. Iván era tan parecido a ella que cuando estaban juntos era como un enfrentamiento por sobresalir; Iván le calentaba la sangre, la volvía loca de deseo. Era como un imán que la atraía hacia él, pero sin embargo chocaban constantemente y no podían fundirse en una sola persona, no se complementaban. Pero Roque…él no era su tipo de chico, nunca se habría fijado en él, pero tenía que reconocer que él era una de las mejores personas que había encontrado en su camino. Siempre la trató bien, siempre estuvo a su lado, es la única persona que la valora de verdad, que siempre ha confiado en ella.

Roque no la incitaba al deseo, a lo prohibido, no hacía que le ardiera la sangre, pero la dulzura con que la miraba, con la que le hablaba, con la que la trataba hacía que sintiera algo especial por él, que deseara tenerlo en su vida.

Definitivamente Roque no era el típico chico al que deseas fervientemente besar, que deseas que te toque, que te haga el amor…Roque no era pasión. Roque es sentimiento. No obstante no podía negar que ese beso le gustó, que la hizo sentir especial, amada.

Sin embargo temía haberle hecho daño. No quería que se hiciera falsas ilusiones, que diera por hecho algo que ni ella tenía claro. Tenía que hablar con él.

Julia se levanta de la cama y deja el libro sobre ella. Camina hacia la puerta y sale de su habitación con dirección al cuarto de Roque. Llama a la puerta y entra.

Julia: Roque, podemos hablar?

CAPITULO 9

 


Aquella mañana de sábado Vicky había amanecido en su cama de casa. La conversación que mantenían sus padres en el salón mientras desayunaban la había despertado. No sabe bien que decían, pero el sonido de sus voces había hecho que despertara de su sueño. Soñaba con él. Iván estaba no solo en su corazón sino también su cabeza; llevaba días que no podía dejar de pensar en él. El acercamiento que habían tenido había hecho que Vicky se diera cuanta de lo mucho que lo seguía queriendo y sufría por ello. Sabía que no podía ser, que no debía quererlo… pero no podía evitarlo.

Esa mañana Vicky quería hacer algo, distraerse para sacarlo de su mente. Entonces recordó que el profesor de Literatura les había comentado que próximamente deberían leer un libro y hacer un trabajo sobre él, que más adelante les explicaría de que se trataba. Así que Vicky no se lo pensó dos veces, iría al centro comercial a comprar el libro. Se levantó de la cama, preparó la ropa que iba a ponerse y se metió en la ducha.
Una vez duchada y arreglada fue a dar los buenos días a sus padres, tomó una fruta y les dijo que tenía que ir a comprar algo para el Colegio, que volvería más tarde.

En el Centro Comercial Vicky paseaba mirando escaparates. Estaba a punto de entrar a la librería pero una tienda de peluches le llamó la atención. Le encantaban los peluches!! Así que decidió entrar a echar un vistazo. Mientras miraba un bonito corazón de peluche alguien le tapó los ojos por detrás.

- Quien soy? Dijo una voz.

A Iván, que estaba en el mismo Centro Comercial mirando teléfonos móviles porque aquella noche en la que murió Toni había perdido el suyo, le había parecido ver a Vicky desde lejos. Estuvo un rato observándola, estaba seguro de que era ella. Pensó en irse sin decirle nada, no quería incomodarla, hacerle más daño, sabía que era mejor mantener las distancias, pero no pudo, había algo que lo llevaba hacia a ella.

Vicky: Iván, que haces aquí?

Iván: He venido a mirar un teléfono móvil, perdí el mío hace varias semanas. Te he visto desde lejos y quería saludarte.

Vicky: Ah! Pues ya lo has hecho, ahora vete.

Iván: Pero Vicky, pensé que todo estaba bien entre nosotros. El otro día cuando te conté lo de María estuviste a mi lado, apoyándome, y ahora me vuelves a echar de él, me rechazas nuevamente.

Vicky: El otro día estabas mal Iván, no podía dejarte así. Necesitabas hablar con alguien, desahogarte y yo te ofrecí mi hombro, como he hecho siempre. Pero sabes que no puede ser, que no debemos estar cerca, no quiero que otras personas sufran, ni quiero seguir sufriendo yo.

A Iván le duele hacer sufrir a Vicky, es lo último que desea pero no quiere dejarla ir, la necesita a su lado, y no sabe muy bien por qué. A él le encanta Julia, ella lo vuelve loco, pero Vicky…Vicky tiene algo que lo atrae. A Julia desea besarla ardientemente, hacerle el amor, pero a Vicky le gustaría abrazarla y tenerla entre sus brazos para siempre.

Iván: Vicky, por que no nos olvidamos de todo?

Vicky: A que te refieres?

Iván: A que empecemos de nuevo. A que nos olvidemos de lo que pasó entre nosotros.
Olvidémonos de Julia, olvidémonos de Carol. Pensemos ahora mismo solo en ti y en mi. Olvidémonos del internado, ahora no estamos en él. Pasemos el día juntos Vicky. Un día solo para nosotros. Nos lo merecemos.

Vicky escucha atónita a Iván. Sabe que debe negarse, que no debe decirle que si, pero le apetece tanto que no puede negarse.

Así comienza un día que para Vicky es como una película. Miran tiendas, comen juntos, van al cine, se hacen fotos…se están divirtiendo muchísimo. No pueden parar de reír, de mirarse, de abrazarse…

Cuando llega la hora Vicky vuelve a casa. Iván la acompaña y cogen por un bonito parque. Sin darse apenas cuenta se han cogido de la mano. Caminan en silencio. Recuerdan el día que han pasado juntos y sienten pesar de que acabe. Iván se para de pronto y jala a Vicky hacia a él. Sus cuerpos están tan cerca que ni el aire pasa entre ellos. La mira fijamente a los ojos, y poco a poco se acerca a sus labios y la besa. Es un beso dulce, que va dando lugar poco a poco a la pasión. Iván la agarra fuertemente por la cintura, nada ni nadie podría separarle en ese momento de él. De pronto Vicky deja de besarlo y separa su cuerpo del suyo.

Vicky: No Iván, dice Vicky llorando. Ya pasé por esto, ya fui la otra en otra ocasión. Ya traicioné a Carol, Julia no se merece que le hagamos esto. Olvida todo lo de hoy, no debió de pasar. Yo no quiero sufrir más, tu nunca me querrás como yo deseo que me quieras. Nunca seré en tu vida lo que a mi me gustaría ser.

Vicky se va rápidamente, a Iván no le da tiempo ni de articular palabra. Piensa que tiene razón, que no estaba bien lo que había pasado, que no debió suceder. Sabe que no está enamorado de Vicky, que no puede ofrecerle lo que ella desea, que la está haciendo sufrir y que ha fallado a Julia. Sin embargo sabe que estar al lado de Vicky lo hace sentirse él mismo, que cuando está con ella se para el tiempo, se siente feliz y que desea tenerla entre sus brazos para siempre. Pero Julia…ella le gusta tanto, la desea tanto…estar con ella es como una fuerza que lo llena de vida. Iván se va, sin poder evitar pensar como hubieran sido las cosas si años atrás él y Carol no hubiesen decidido darse otra oportunidad y hubiera apostado por lo que sentía por Vicky.

Al día siguiente, cuando Vicky llega al Internado hay algo sobre su cama. Allí está en corazón de peluche que miraba en la tienda y debajo de él se encuentra una de las fotos que se hizo con Iván el día anterior. Vicky no puede evitar sonreír, al saber que Iván ha dejado eso ahí para ella.

CAPITULO 10

 


Roque mira fijamente a Julia. Está preciosa, bueno ella siempre lo está, piensa él. Le sonríe y con un gesto la invita a sentarse cerca de él para que puedan hablar.

Roque: Qué pasa?

Julia: Roque, tenemos que hablar de lo que pasó el otro día. Yo no…

Roque: Déjalo Julia, no me tienes que explicar nada, no te estoy pidiendo explicaciones. Me besaste, te besé y fin de la historia. Tranquila, no me creo castillos en el aire, yo sé a lo que atenerme. Sé por qué lo hiciste. Estabas enfadada con Iván y yo estaba ahí y…

Julia: No, Roque. Tampoco es eso. No quiero que pienses que te utilicé, porque no es así.

Roque: Julia no nos engañemos. Los dos sabemos que fue eso. Él te trató mal, te rechazó y tu orgullo herido no pudo soportarlo. Luego llegué yo a colmarte de piropos, a darte toda la dulzura que tú me inspiras y te dejaste llevar. Sé que tu no me quieres, pero no me arrepiento de lo que pasó, si el tiempo volviera atrás volvería a hacer lo mismo. Sé que nunca me amarás aunque no haya nada que yo no te diera si tú me quisieras, Julia si yo fuera él…Pero al menos tendré algotuyo, algo que será mío para siempre y que nadie podrá quitarme, el recuerdo de tus labios sobre los míos. Me moría de sed por un solo beso y tú la has calmado. Sea como sea tú serás siempre en mi vida el amor que soñé, auque nunca seas en ella lo que a mi me gustaría que fueses.

Uy! Dice Roque. Soy demasiado cursi no? Un poco más y te canto la canción de Christian Castro entera. Roque sonríe tímidamente, está un poco avergonzado y agacha la cabeza.

Julia lo mira fascinada, es tan bonito lo que le dice Roque que no puede ni quiere evitar besarlo de nuevo. Su dulzura le es tan tentativa…que en el fondo desearía estar enamorada de él. Piensa que ojala pudiera fundir a Iván y a Roque en una sola persona con lo mejor de cada uno de ellos.

Julia: No Roque, no agaches la cabeza, es tan bonito eso que me dices. No pensé que pudiera inspirarle ese sentimiento a nadie. Dulzura? Yo no tengo de eso.

Roque: A mi no trates de engañarme. Sé que la rebeldía y la dureza es una fachada que tú misma te has creado para que no te lastimen más. Pero sé que en el fondo deseas solo que te quieran, que te mimen, que te hagan sentir que eres la mujer más valiosa del mundo.

Julia no puede controlarse más y nuevamente besa a Roque. Es tan diferente ese beso a los besos de Iván… Iván parece que quisiera comérsela, en cambio Roque parece que quisiera rodearla de ternura.

Iván, lleva un rato escuchando la conversación. Iba a entrar a la habitación cuando ha escuchado a Julia hablar con Roque. Pero no quería interrumpirlos, sabe que son buenos amigos y se estarían contando algo importante. Sin embargo, sin ser su intención ha escuchado las cosas que Roque le decía a Julia y al escuchar un silencio prolongado decide entrar sigilosamente. Allí sin percatarse de su presencia están Roque y Julia besándose. No sabe que hacer, está enfadado, celoso, pero no sabe si realmente le duele porque la ama, o porque la considera suya y no le gusta que otro chico pueda tenerla. De pronto recuerda cuando Vicky los pilló a Julia y a él en el baño, ahora es él quien está en esa situación, la chica a la que él besaba está besando ahora a uno de sus mejores amigos, pero qué sintió Vicky en ese entonces? Está seguro que dolor, desolación, desengaño, tristeza y no está seguro de que él esté sintiendo esas cosas en ese momento. Por lo que no puede evitar cuestionarse: Qué sentiría si la chica que estaba besando a Roque no hubiese sido Julia sino Vicky?


CAPITULO (SUELTO)

 

 


Vicky abraza el corazón de peluche contra su cuerpo mientras mira la foto que ella e Iván se sacaron ese día. Recuerda con una sonrisa en los labios aquellos momentos que pasaron juntos y piensa que nunca fue tan feliz, que lo ama como nunca amó a nadie y que tiene que arriesgarse, que siente hacer sufrir a Julia, pero más vale que sufra una persona y no tres, luchará por Iván, pondrá todo de su parte, hará lo que haga falta, pero Iván será suyo.

Vicky busca a Iván, Marcos le dice que se está duchando. Ella sonríe pícara y va a su encuentro. Allí en el baño se quita la ropa y se introduce a la ducha, abrazando por detrás a Iván. Iván sorprendido se vuelve:

Iván: Vicky? Que haces aquí?

Vicky sonríe y besa apasionadamente a Iván, que la rechaza.

Vicky: Dejémonos de tonterías Iván, basta de juegos, olvidémonos de todo y estemos juntos sin importarnos nada más.

Iván: Vicky yo…

Vicky: Tú que? Es lo que querías no? Me has estado buscando e insistiendo sin cesar, pues ya está, aquí me tienes.

Iván le dice a Vicky que lo siente. Siente que se haya vuelto a hacer ilusiones. Estaba confuso, pensó que sentía algo por ella pero lo cierto es que no. Ver a Julia con Roque le había hecho abrir los ojos, la quería, estaba verdaderamente enamorado de Julia.

Vicky sale de la ducha llorando, está llena de rabia y de odio y sin más va en busca de Julia, está decidida a hacer lo que sea con tal de que Iván se quede con ella.

Entra a la habitación, se dirige hacia Julia que se estaba peinando frente al espejo, la coge del cabello y le grita que Iván no la quiere, que le hizo el amor, que está con ella pero por pena no se atreve a dejarla. Julia llora y pide a Vicky que la suelte, está segura de que le está mintiendo.

Julia: Por qué me haces esto Vicky? Yo nunca me he portado mal contigo. No me merezco esto. Sé que has sufrido porque Iván nunca te ha querido, pero no es culpa mía. No te humilles más, acepta que no te quiere.

Vicky al escuchar sus palabras enfurece más. Pega a Julia con todas sus fuerzas. Ésta cae sobre la cama y Vicky sin pensárselo dos veces se sube encima de ella y le tapa la cara con una almohada, aprieta y aprieta hasta que Julia pierde las fuerzas. Está muerta.

Vicky sonríe satisfecha coge su teléfono móvil y hace una llamada.

Vicky: Lo he hecho. Está muerta.

Vicky habla con sus cómplices, concretamente con Camilo. Ella es un topo de la organización de Géminis.

Con la ayuda de Camilo y Noiret logra deshacerse del cuerpo y dejan una nota haciendo creer que Julia se ha fugado. En elladecía que no aguantaba más ese colegio, ni a sus compañeros ni a Iván, que no quería saber nada de ninguno de ellos.

Iván está abatido, no puede creer que Julia se haya marchado. Vicky comprensiva se acerca a él, diciendo que independientemente de lo que haya pasado puede contar con ella, siempre será su apoyo y su amiga.

9 años después Vicky sonríe mientras recuerda lo que hizo aquel día y piensa que fue lo mejor que hizo en la vida. Está en casa arreglándose, pues es el día de su boda con Iván.
Éste va conduciendo hacia la Iglesia, cuando de pronto mira al asiento del copiloto y ve a Julia sentada a su lado. Da un volantazo pero no pierde el control del coche y consigue parar a un lado de la carretera. El fantasma de Julia le cuenta a Iván lo que pasó aquel día, como Vicky la mató. Iván no puede creer lo que oye.

Allí en la Iglesia están todos los invitados. Vicky entra a la Iglesia del brazo de Noiret, su padrino de bodas y camina radiante hasta el altar donde Iván la espera. Comienza la ceremonia y cuando el cura pregunta a Iván si acepta a Vicky por esposa, allí delante de todos dice que no, que no la acepta y les relata como Vicky mató a Julia 9 años atrás. Los presentes no creen ni una palabra de lo que Iván dice, conocen a Vicky, no sería capaz de hacerle daño a nadie. Iván repite una y otra vez que es cierto, que Julia está ahí con ellos y se lo ha contado.

Vicky sale llorando de la Iglesia y no quiere que nadie la acompañe, le grita a Iván que si no quería casarse con ella no hacía falta que se inventara esa historia para evitarlo.
Iván se siente satisfecho, mira al fantasma de Julia la agarra de la mano y le pide al cura que los case. El sacerdote no puede creer lo que aquel fiel le estaba pidiendo, pero él insistía una y otra vez en que Julia estaba ahí y que querían casarse.

Así acaba esta historia, al igual que la canción de Gloria Trevi aunque con los papeles invertidos: la fantasma y el loco se quieren casar…(8). Iván se quedó con Julia, fueron felices para siempre viviendo en una bonita casa acolchada toda de color blanco mientras que Vicky lo perdió todo y quedó vagabundeando por las calles.

CAPITULO 11

 


En el comedor, Marcos, Carol, Roque, Iván, Julia y Vicky están sentados en la mesa almorzando. Solo hay miradas entre ellos, apenas intercambien ninguna palabra. Vicky está pensativa, mueve la comida del plato de un lado para otro, pero pocas veces se la lleva a la boca. Iván la mira de vez en cuando, trata de disimular su interés pero la verdad es que le encantaría saber que está pensando. Julia está sentada a su lado, pero tampoco conversa con ella, está dolido por lo que vio en su cuarto.

Pero bueno chicos, que os pasa? Se podría cortar la tensión que hay en el ambiente, dijo María.

Si las miradas matasen María hubiese caído fusilada al suelo. - Que te pires chacha-, le dijo Iván. María dejó el pan que les llevaba en la mesa y se retiró triste, no podía soportar que Iván la tratase de ese modo y sufría enormemente al pensar que su hijo nunca la querría, nunca le daría un abrazo, nunca le diría mamá.

Carol: No te gusta la comida de hoy Vicky? Ni siquiera la has probado.

Vicky: Es que no tengo hambre, con esto de los exámenes tendré el estomago revuelto. Me voy a estudiar un poco. Así aprovecho el tiempo. Te vienes Carol?

Carol: Uff paso de ponerme con Historia ahora, menudo rollaso, se me va a indigestar la comida.

Vicky se levanta de la mesa y se dirige hacia la biblioteca. No le da ni tiempo ni de abrir el libro cuando siente que alguien se sienta a su lado.

Vicky: Qué haces?

Iván: Estudiar contigo. Dicen que a veces lo bueno se pega no? A ver si me pega algo de ti y apruebo las asignatura, que ya llevo demasiadas suspensas.

Vicky: Si ya claro, estudiar…

Iván: Bueno, vale…solo quería estar contigo un rato. Te gustó mi regalo?

Vicky: Iván, ya te he dicho que…

Iván: Sí, lo sé. No hace falta que me lo repitas. Ya te escuché, pero ahora escúchame tú a mí. No se lo que siento Vicky, no te puedo jurar amor porque no sé si es ese sentimiento el que me provocas. Estás tú, está Julia, está todo lo de mis padres y yo tengo la cabeza hecha un lío. Yo solo sé que busco estar a tu lado, que no puedo dejar de pensar en ti, que me gustas, que deseo besarte, abrazarte, borrar cada lágrima que has derramado por mí y convertirlas en sonrisas. Te juro que no quiero lastimarte ni jugar contigo. Solo quiero que me des la oportunidad de descubrir si mi felicidad está a tu lado o si en verdad estoy enamorado de Julia, tampoco a ella quiero lastimarla.

Vicky se siente aturdida. Realmente las palabras de Iván hacen mella en ella. Siente como si cada palabra que le dice intentara entrar y arroparse en su corazón, y aunque éste tenía un ejército entero protegiendo sus murallas, conseguían vencerlo y colarse dentro de él. Sin embargo, no desea hacerle daño a Julia, ella sufrió tanto cuando creyó a Iván enamorado de ella y luego éste decidió volver con Carol…que no desea ese sufrimiento para Julia.
Julia está con Iván, estará tan ilusionada y enamorada como lo estaba ella, incluso más, porque su relación no vive en el anonimato como vivió la de ella, y si ella se lo quita…puede imaginarse el dolor de Julia, y ella no desea hacerle daño, también es su amiga.

Vicky: Si no quieres lastimar a Julia entonces aléjate de mi Iván. Siempre estuve ahí, siempre te quise y tú sin embargo pudiendo estar conmigo la elegiste a ella, así que lo mejor es dejar las cosas como están y que te olvides de mí. Ella te quiere y no merece que la hagamos sufrir.

Iván: Y tú como estás tan segura de que me quiere? Yo no estoy tan seguro…

Vicky: Por qué dices eso?

Iván: No por nada.

Vicky: Iván sabes que a mi no puedes engañarme. Para mí tú eres como el agua, transparente.

Iván: Ya…lo que pasa es que…es que he visto a Julia y a Roque besándose.

Vicky: No creo…sería un beso de amigos no?

Iván: No, eso no era de amigos, además tu sabes tan bien como yo que a Roque siempre le ha gustado Julia, vamos babeaba por ella.

Vicky: Pero a Julia Roque no…

Iván: Eso creía yo, pero ya no sé que pensar, después de lo que escuché y de lo que vi.

Vicky: Y tu como te sientes después de haberlos pillado?

Iván: Pues…la verdad no sé. Me da rabia que otro la bese, puede que esté celoso, pero realmente no estoy seguro de que me duela, de que esto me haya hecho sufrir. No es que me de igual, pero tampoco me lo he tomado como una tragedia no se…

Vicky toma de la mano a Iván, sabe que no debe pero necesita hacerlo, aunque intente poner resistencia ella lo ama y si Julia ha engañado a Iván, tal vez sea porque no está realmente enamorada, si ella se anda besando con otro, por qué ella va a rechazar a su gran amor por no hacerle daño?

Iván mira a Vicky, le acaricia dulcemente la mejilla y se acerca con la intención de besarla. Pero de pronto advierte la presencia de Julia, que desde lejos los está observando. Julia se da cuenta de que pasa algo entre ellos, de que estaba a punto de besarla y se marcha de la biblioteca con prisa. Iván no sabe que hacer, no quiere separarse de Vicky pero tampoco quiere dejar así a Julia.

Ve tras ella, le dice con una voz entrecortada y triste Vicky. Necesitáis hablar y aclarar muchas cosas. Si después de eso sigues pensando que sientes algo por mi, yo estaré esperándote. Y si decides quedarte a su lado porque de verdad la amas lo comprenderé y no te guardaré rencor, seremos amigos como siempre.

CAPITULO 12

 


Julia camina apresurada, sin dejar de pensar en lo que ha visto entre Vicky e Iván en la Biblioteca. Llega a su habitación, abre la puerta bruscamente y se tumba en su cama. Las lágrimas corren por sus mejillas, siente tanta rabie e impotencia que no puede controlar sus sentimientos. Alarga su brazo y abre el cajón de la mesita que está lado de su cama. Rebusca entre las cosas y saca una foto. Es una foto que se hizo con Iván no hace mucho. La mira con nostalgia, le gustaría que las cosas fueran como antes pero no puede negar que todo ha cambiado radicalmente. La furia se apodera de ella y grita imbecil! Mientras rompe la foto.

Iván que ha ido a su encuentro entra despacio y nervioso en la habitación, sabe que lo que le espera no es fácil. No quiere lastimar ni a una ni a otra, sabe que debe decidirse y sea cual sea su decisión alguien acabará sufriendo.

Iván: Julia…

Julia: Vete! Fuera de aquí, no quiero verte! Dice Julia entre sollozos.

Iván: No, no me voy a ir, tenemos que hablar.

Julia: No quiero, pirate de una vez niñato. Nunca voy a perdonarte lo que he visto.

Iván: Pero de que vas Casper? Con que cara me dices eso cuando ni siquiera has visto que la besara? yo sin embargo si que te vi besándote con Roque.

Julia calla un momento, no sabe que decir. Ella no esperaba que Iván supiera lo de Roque, pero no puede negarlo. Tal vez no tenga derecho a ponerse así con Iván cuando su actitud también había dejado mucho que desear, pero el dolor, la rabia, la impotencia podían con ella.

Julia: Tú tienes la culpa Iván. Tú me echaste en sus brazos. Tú y solo Tú eres el culpable.

Iván: Ah! De P___ madre tía. Me engañas con el enano y encima la culpa es mía. Y no contenta con eso, te pones así de patosa porque me ves con Vicky, cuando no estábamos haciendo nada.

Julia: No lo entiendes verdad?

Iván: No se que es lo que tengo que entender.

Julia: Que me siento sola Iván. Que no tenga nada en este mundo, que solo quiero que me den cariño, que me quieran, que me hagan sentir especial. Sentía algo fuerte por ti, tal vez amor, no lo se bien… sentía que tal vez a tu lado podría olvidar el calvario que he pasado, podría sentirme segura, protegida, amada…podría sentir que aunque yo para el mundo no soy nada, al menos para una solo persona yo era su mundo. Pero esa persona no eres tú. Tú siempre tan borde, sin decirme un te quiero, sin decirme una sola palabra bonita, sin una caricia, sin un abrazo, sin un beso con ternura…solo pasión, deseo, frenesí. Y luego ni eso, te alejaste de mi, me rechazabas y Roque…para Roque yo soy todo lo que yo deseaba que fuera para ti. Él me ofrecía todo lo que anhelo y lo que tú me negabas.

Iván: Bueno y si Roque te da eso que yo no te doy, por que te pones así al verme con Vicky? Si tú lo tienes a él.

Julia: Porque veo que le das a ella lo que me niegas a mi. Me da rabia que a mi me hayas negado lo que ansiaba y ver ahora como la miras…parece que la acariciaras con la mirada, le agarras la mano como si no desearas volver a soltarla nunca, y la caricias…la acaricias como si fuera lo mas bello y dulce que has visto nunca, con la dulzura con la que nunca me has tocado a mi. No hace falta que os vea basándoos o en la cama para que me de cuenta de que hay algo fuerte entre vosotros. Algo profundo y diferente a lo que nos une a ti y a mi. Por eso han cambiado las cosas entre tu y yo, porque la pasión y el deseo necesitan de los sentimientos para seguir ardiendo, pero si carece de ellos acaba apagándose, no pueden vivir por si solos para siempre.

Iván: Julia yo no sé exactamente que siento por ti, ni que siento por ella. Sé que tengo sentimientos hacia las dos, pero no se cuales. No sé que siento por cada una de vosotras. Y tú? Estás enamorada de Roque?

Julia: Me gustaría estarlo, pero sería engañarme a mi misma. Realmente no sé que siento ni por ti no por él, pero sí sé que me gustaría amarlo. Sé que con él sería feliz y tal vez poco a poco Roque podría conseguir que me enamorara de él.

Iván calla, se queda pensativo. Debe decidir que hacer. Por un lado Julia y por el otro Vicky, era demasiado duro elegir, y más cuando no tenía claro sus sentimientos. Cada una le inspira cosas diferentes, Julia la pasión, el deseo, la adrenalina, la vitalidad…Julia le hacía arder la sangre. Vicky la dulzura, el sentimiento, la estabilidad, tal vez el amor sensible y puro que nunca había tenido. Pero quizás su oportunidad ya pasó, pudo estar con ella y eligió volver con Carol, y ahora estaba con Julia, tal vez lo mejor era dejar las cosas así, luchar por lo que tiene y no por lo que podría tener. Iván se sentía mal por haberle hecho daño a Julia, por no haberle dado lo que ella necesitaba y en esos momentos Julia lo precisaba, con todo lo de la muerte de su padre, su encierro en un psiquiátrico…no, no podía abandonarla ahora.

Iván: Julia, intentémoslo de nuevo. Tal vez aún estemos a tiempo de arreglarlo. Puede que no haya sabido valorarte, pero para mi tu eres alguien especial. Sé que has sufrido y que te sientes sola, pero me tienes a mí, yo estaré a tu lado, intentaré ser para ti lo que tú deseas que sea. Por favor perdóname y sigue conmigo.

Julia lo pensó brevemente. Se secó las lágrimas que rodaban por sus mejillas y asintió levemente. Tenía que descubrir si en verdad amaba a Iván y para eso tenía que estar a su lado. Además había depositado tantas ilusiones en él que no quería darlas por perdidas tan fácilmente, aunque sabía que no sería fácil y que no había garantías de que funcionara, porque ella los había visto, ella sabía que lo que Iván y Vicky sentían era fuerte.

Se acercó lentamente a Iván y lo besó suavemente. Iván le correspondió pero no pudo apartar de su mente a Vicky ni un solo momento. Luego salieron a dar un paseo por los jardines, cogidos de la mano. Vicky los vio a lo lejos, paseaban conversando y agarrados de la mano. Su corazón sintió que había vuelto a perder, parecía que se había roto en mil pedacitos. Se apresuró a detener la lágrima que empezaba a caer por su rostro. Sonrío débilmente y pensó en que su cajita de cristal ahora guardaría también otra parte de su historia, aun más secreta, ya que nadie sabía lo que había pasado durante esos días. Se juró que sería lo último de Iván que guardaría en ella. Haría que se quebrase en diminutos trocitos para que su amor quedase en el olvido. Luego los volvió a mirar: Ojala que hayas elegido bien Iván y que seas muy feliz, dijo Vicky, porque no habrá otra oportunidad, aquí se acabó todo. Yo también tengo derecho a ser feliz.

CAPITULO 13

 

 


Había pasado varias semanas desde que Julia e Iván se habían reconciliado. Tanto Roque como Vicky aceptaron su derrota y tras una leve sonrisa escondían toda su tristeza, cuando amas de verdad tienes que dejar que la otra persona sea feliz, aunque no sea contigo.

Iván estaba haciendo lo posible por contentar a Julia, pero no apartaba a Vicky ni un momento ni de su cabeza ni de su corazón. A veces buscaba su compañía, le consolaba la idea de poder tenerla cerca aunque fuera como amiga, pero Vicky procuraba no acercarse a él, rechazaba su compañía tajantemente, no quería estar a solas con Iván así evitaría volver a convertirse en la otra como fue años atrás, la carne es débil y ella no podía negar que lo amaba.

Aquel día estaban todos sentados en el jardín. Pronto sería el aniversario de la abertura del internado la laguna negra y se rumoreaba que tendría lugar una gran fiesta para celebrarlo. Los chicos hablaban de la música y de la juerga que deseaban meterse, las chicas sin embargo hablaban de que elegirían para ponerse ese día.

Roque estaba un poco distraído. Desde que les habían comunicado a los chicos que un nuevo alumno vendría y ocuparía la cama que había sido de Cayetano no había podido dejar de pensar en su amigo, en lo mucho que lo extrañaba y lo difícil que era para él que otra persona ocupara su lugar.

Estaban todos tan metidos en la charla que no se habían percatado de que se acercaba María en compañía de un chico nuevo.

- Victoria, eres tu? Dijo eso chico antes de que María dijera nada.

Vicky se apresuró a mirar al chico que le hablaba. Era un chico alto, de pelo castaño y ojos verdes. Tendría algunos años más que ellos y aunque no era excesivamente guapo, tenía algo que lo hacía tremendamente atractivo.

- Sí, claro que eres tú, jamás podría olvidar unos ojos como los tuyos. Estás preciosa. Dijo el chico sin borrar ni por un instante la bonita sonrisa de sus labios.

Vicky: Perdona, nos conocemos?

Vicky creía ver algo familiar en ese chico, pero no lo relacionaba con nadie que ella conociera, sin embargo parecía que ese chico la conociera muy bien.

Chico nuevo: Tanto he cambiado que no me reconoces? Dice el chico riéndose. Tú apenas has cambiado, ya no eres una niña, pero sigues igual de bonita que siempre, te hubiese reconocido entre miles de chicas.

A esas alturas Vicky ya estaba ruborizada. Ese chico tan apuesto parecía conocerla, la estaba bombardeando a piropos y encima ella no recordaba quien era. Iván lo miraba con desconfianza y desagrado, quien era ese chico? Que derecho tenía de decirle esas cosas a Vicky?

Chico nuevo: Bueno, espero que esto te haga recordar. (el joven metió su mano en el bolsillo y de él sacó un juego de llaves. De ellas desanudó una vieja pulsera de hilo, la apretó fuerte en su mano y se la lanzó a Vicky mientras le guiñaba un ojo)

Chico nuevo: Cuando recuerdes quien soy búscame, podrías servirme de guía y enseñarme esto. Además me apetece tanto charlar contigo…tenemos muchas cosas que contarnos.

El chico se alejaba mientras Vicky miraba atónita la pulsera que le había dado. Julia, Roque, Marcos e Iván le preguntaban insistentes que significaba esa pulsera y quien era aquel chico, entonces Carol asombrada miró a Vicky y le dijo:

Carol: Vicky, ese chico no será…

No había terminado de decir la frase cuando Vicky se dirigió a María que seguía allí con ellos.

Vicky: María, por casualidad ese chico no se llamará Daniel, verdad? Que preguntas hago dijo seguidamente Vicky a María sin dejar que esta contestara. Claro que es Dani, solo él tendría esta pulsera.

María: Sí, ese chico es Daniel Avelarde. Es el alumno nuevo que estábamos esperando. Va a compartir cuarto con vosotros como ya sabéis, dijo dirigiéndose a los chicos, pero no va a vuestro curso, acaba de volver de Francia con su familia, y va ha terminar el bachillerato aquí, es mayor que ustedes.

Vicky no podía creer que ese atractivo joven fuera Dani, hacía más de 4 años que no lo veía y en ese tiempo había cambiado mucho.

Carol: Dios mío Vicky, es él!! Cuantas veces me hablaste de él y ahora está aquí, y es monísimo!!

Julia: Pero quien es? Lo vais a decir de una vez?

Vicky: Dani fue mi primer amor. Era el mejor amigo de un primo mío, y nos conocíamos desde pequeños. Siempre estuve loquita por él, dijo Vicky mientras sonreía pero él tenía 2 años más que yo y siempre pensé que me veía como a una niña. Recuerdo el día que nos contó a mi primo Rafa y a mi que su mudaba a Francia con su familia, su padre tenía problemas económicos, y allí un tío suyo le ofrecía un buen empleo en una empresa. Era un fin de semana, hacia tiempo que no los veía ya que al estar aquí iba poco por casa. Vinieron a buscarme a casa y fuimos al cine. Por el camino nos lo contó. No recuerdo ni que película vimos. Me llevé toda la película pensando en que tal vez no lo vería más y trataba de controlarme para que no me viera llorar. Cuando terminó Rafa se fue para su casa y él se ofreció a acompañarme hasta la mía. Por el camino me agarró la mano, recuerdo lo nerviosa que me puse. Me dijo que yo le gustaba mucho, y que tenia que decírmelo antes de irse, entonces me dio mi primer beso. Nunca lo olvidaré. Yo le regalé esta pulsera que había hecho yo misma, era mi favorita, mi pulsera de la suerte. Le dije que así se acordaría de mí y que algún día nos volveríamos a ver y entonces me la devolvería.

Carol: Y aún sientes algo por él? Te sigue gustando ese chico? (Carol sabía perfectamente la respuesta, sabía de los sentimientos de su amiga hacia Iván, pero pensaba que ese chico podría ser lo que su mejor amiga necesitaba para ser feliz, ella también se merecía que alguien la quisiera de verdad).

Vicky: Claro que no Carol. Entonces yo solo tenía 12 años, ha pasado mucho tiempo desde entonces… pero lo cierto es que está guapísimo y que me muero de ganas de hablar con él, tenemos que ponernos al día!!

Vicky se levantó y se encaminó apresurada hacia dentro, quería buscar a Dani y decirle que ya sabia quien era. Ese chico fue importante en su vida, y que haya vuelto precisamente ahora a su vida tal vez significaba algo, y ella estaba dispuesta a averiguar el que. Iván la miraba desde donde estaba sentado, la veía alejarse y de pronto sintió miedo, una sensación de pánico y dolor se apoderó de él, en ese momento sintió que perdía a Vicky.

CAPITULO 14

 


Mientras iba en busca de Dani, las imágenes de su infancia con él pasaban una y otra vez por su mente. Le gustaba tanto ese chico a pesar de ser una niña... que no puede evitar preguntarse qué habría pasado si él y su familia no hubieran tenido que mudarse. Tal vez lo más probable es que no hubiesen llegado a nada, apenas eran unos niños todavía, pero quizás…quizás entonces ella no se hubiese enamorado de Iván, y se hubiese ahorrado tantas lágrimas…

Vicky llega a la puerta de la habitación de los chicos, está a punto de tocar a la puerta, pero un extraño sentimiento se apodera de ella. Estaba claro que el niño que ella conocía había dejado de existir dando paso al joven que ahora se hallaba allí dentro, y era eso lo que la asustaba, ya no eran niños, y a ese joven no lo conocía, no sabia que intenciones tenia respecto a ella, pues estaba segura que no era ninguna casualidad que el hubiese venido a la laguna negra, el sabía muy bien que ella estudiaba allí. Vicky no se lo piensa más, toca la puerta y pasa:

Vicky: No esperaba que aún la tuvieras contigo, dice Vicky mientras mira la pulsera que lleva en su mano y que minutos antes él le había dado.

Dani: Ya sabes quien soy, o fui tan poco importante en tu vida que ya me has olvidado?

Vicky: Lo siento Dani, yo jamás me olvidaré de ti, pero estas tan cambiado… y nunca habría ni imaginado que vendrías a estudiar a este internado. ¿Qué haces aquí?

Dani: Pues es un poco largo de contar, desde que me fui de España hace más de 4 años hasta hoy han pasado muchas cosas.

Vicky: Tengo todo el tiempo del mundo para que me las cuentes, dijo Vicky mientras se sentaba en su cama y le sonreía.

Dani: Pues…a ver por donde empiezo, dice el chico mientras sigue colocando su ropa en el armario. No sé si alguna vez te conté que mi abuelo era un rico empresario. Emigró a Francia cuando era muy joven por motivos laborales, y fue escalando puestos, hasta llegar a convertirse en un gran empresario. Era dueño de una gran cadena hotelera. Sin embargo el dinero y la posición hicieron que se convirtiera en una persona soberbia. Mi padre no era así, no le importaba ni el dinero ni la posición y se codeaba con todo el mundo. En una de sus escapadas aquí, a España, conoció a mi madre, era la recepcionista del hotel donde se hospedaba. Ellos se enamoraron pero mi abuelo desaprobó esa relación, sin embargo a mi padre le dio todo igual, se vino a España y se casó con ella. Poco después nací yo. Mi abuelo seguía sin aceptarlo y decidió desheredarlo. Murió poco después, dejándole todo a un hermano suyo. Él fue quien ayudó a mi padre cuando perdió el empleo. Nos consiguió una casa y empleó a mis padres en uno de los hoteles. Poco a poco nos fuimos recuperando y mi padre volvió a tener dinero y una buena posición. Hace poco decidieron comprar y rehabilitar el hotel donde se conocieron mis padres. El proyecto les gustó tanto que decidieron volver y dirigir ellos este hotel una vez terminaran las obras. Y aquí estamos.

Vicky: vaya, parece un culebron de esos que echan a las 4 de la tarde, dijo entre risas. Pero y por qué este internado? Por qué la laguna negra?

Dani: Me dieron a elegir el colegio o instituto que yo quisiera. Estaba un poco enfadado, hace años tuve que separarme de ti y de rafa que erais mis mejores amigos y hacer otros nuevos en Francia, ahora tenía que despedirme de ellos y volver a hacer amigos aquí. Entonces recordé cuando me hablabas de tu colegio. Sabía que era un internado de niños repipis de mami y papi y que no tendría problemas para que me admitieran a estas alturas del curso y encima…cabía la posibilidad de reencontrarme contigo, guardaba la esperanza de que siguieras aquí, le dice el chico mientras se sienta a su lado sin dejar de mirarla fijamente a los ojos.

Vicky: Si claro, ahora me harás creer que te acordabas de mi, si no nos contestaste ni a Rafa ni a mi ni una sola carta.

Dani: Tenía que hacer una nueva vida Vicky, y si no rompía lazos con vosotros no lo conseguiría. No fue fácil, pero tenía que hacerlo, tenía que acostumbrarme a aquello, tenía que hacerlo por mis padres. Así llegaron nuevos amigos y…claro…algún que otro nuevo amor, pero realmente nunca me olvidé de vosotros, por eso siempre conservé esa pulsera conmigo.

Vicky estaba sonrojada. Al lado de Dani se volvía a sentir como una niña ilusionada. Cierto era que había pasado mucho tiempo, que aquel sentimiento de chiquillos apenas aspiraba a ser amor, y que había pasado tanto tiento…que ya no sentía nada. Sin embargo era muy atractivo y sus ojos, sus gestos, sus palabras invitaban a Vicky a interesarse nuevamente por él. Era consciente de que estaba perdidamente enamorada de Iván, pero sentía que si ese chico quisiera podría ayudarla a olvidar y hacerla sonreír nuevamente, dejando su historia de amor con Iván en un triste recuerdo, y creando una nueva historia de amor para ella y esta vez sin lagrimas, sin angustia, sin dolor, sin tener que pelear con nadie por su amor.

Vicky: Me alegra que no te olvidaras de nosotros. Rafa y yo hablábamos mucho de ti. También le hablaba de ti a Carol, le contaba tantas cosas…y a veces me imaginaba que sería de tu vida, y ahora estás aquí, no puedo creérmelo! Vuelves a mi vida (como un soplo de aire fresco pensó Vicky).

Dani: Sí, he vuelto. Y al igual que no quise irme sin decirte lo que sentía y besarte, ahora no quiero que pase ni un minuto más sin probar tus labios de nuevo, sin decirte lo preciosa que estás y lo mucho que me sigues gustando.

Dani se acerca lentamente a Vicky, le retira el pelo de la cara, le acaricia la mejilla y poco a poco va aproximando sus labios a los de ella. Vicky no sabe como reaccionar, por un lado desea que la bese pero por otro…siente como si lo estuviera utilizando, y que mientras la besaba seguramente no pensaría en el sino en Iván.

De pronto algo los interrumpe. La puerta de la habitación se abre y alguien los mira fijamente. Iván al entrar a la habitación ha visto la escena, Dani estaba a punto de besar a Vicky, y ella no aparentaba querer rechazarlo. A Iván se le calienta la sangre solo de pensar que ese chico pudiera besar a su ángel, pero como siempre oculta sus sentimientos, disfraza sus celos, su coraje, en pura chulería.

Iván: J__der tío, tú no pierdes el tiempo eh listillo? Oye te gustan los caballos? Porque me parece a mi que vas a tener una relación Co___nuda con ellos.

Dani: Los caballos? Bueno sí…sé montar.

Iván: genial guapito, pero dudo mucho que eso te vaya a servir para la pechá de limpiar cuadras que te vas a dar.

Vicky mira a Iván con cara de pocos amigos, no le gusta nada que trate así a Dani.

Dani: Qué? Limpiar cuadras por qué?

Iván: A ver guapito de cara, en este P__to internado, hasta no lavarse la cara se castiga con una semana de cuadra, y tu no haces más que llegar y estás a solas con una titi en tu habitación, en tu cama y a punto de besarla, esto a Elsa o a Camilo le encantaría.
Anda Friki de los ordenadores, dice dirigiéndose a Vicky, pirate de aquí que quiero cambiarme de ropa.

Vicky se levanta muy enojada de la cama, se apresura en irse, porque si se queda un minuto más no sabe que sería capaz de decirle o hacerle a Iván. Eres idiota!! Le dice antes de salir de la habitación y dar un portazo.

Iván queda pensativo, mientras se cambia no puede evitar pensar en lo que ha visto. Era una escena parecida a la que hace algunas semanas vio entre Roque y Julia. Aquella vez no sabe bien que sintió, pero ahora… ahora sabe perfectamente que le hierve la sangre, que mataría a piñas a ese guaperas que acababa de llegar. Sí, está celoso lo reconoce. Le duele pensar que otro chico puede mirar a Vicky, tocarla, besarla…y se cuestiona si tal vez tomó la decisión adecuada. No podía dejar a Julia, pero siguen sin conseguir que su relación funcione bien, y ahora posiblemente sea demasiado tarde para volver atrás.

CAPITULO 15

 


Vicky, Dani y Carol estaban en el comedor, sentados en la mesa esperando a los demás para comer. Dani les contaba a las chicas cosas de su vida en Francia además de anécdotas de su infancia junto a Rafa y Vicky. Se lo estaban pasando genial, no paraban de reírse.
Iván, Julia, Roque y Marcos entran en el comedor, buscan con la mirada la mesa en la que estaban las chicas sentadas y las ven divertidas junto a Dani.

Qué éxito tiene el nuevo no? Dijo Julia.

Iván clava la mirada en Dani, nunca antes había detestado tanto a nadie, ni deseado tanto que desapareciera en el acto.
Se acercan a la mesa, saludan y se sientan a comer con ellos.

Iván: Joder tío, estás hasta en la sopa. Como si no fuera suficiente compartir cuarto contigo…ahora también comes con nosotros.

Dani: Mira tío, no sé que te he hecho, pero no voy a aguantar tus tonterías de niño rico prepotente.

Iván: Mira chavalote, pirate a otra mesa mejor que aquí estás sobrando.

Dani se levanta enfadado, siente que Iván lo humilla constantemente que busca cualquier excusa para atacarlo y no entiende el por qué. No quiere seguir aguantándolo, coge su plato de la mesa y hace el intento de marcharse pero Vicky le jala del brazo para detenerlo.

Vicky: Ah sí Iván? Está sobrando aquí? Y eso quien lo dice? Tú? A ver explícanos por que sobra, a ver…

Iván: Porque yo lo digo Friki. Esto es una comida entre amigos, nunca se ha sentado con nosotros nadie que no fuera del grupo, no lo va a hacer el pringado este…ya ocupa el lugar de Caye en el cuarto, no lo va a ocupar en el grupo también.

Vicky: No seas injusto Iván, él no tiene la culpa de eso. Pero tranquilo, que si él está demás se va a otra mesa, pero yo me voy con él.

Vicky se levanta, coge su plato y hace un gesto a dani para que la siga, va a buscar sitio en otra mesa. Iván está a punto de detenerla, pero si lo hace caería su mascara de chulito y los demás se darían cuenta de que le pasa algo con ella.

Carol: Joder Iván, córtate un poquito, ya sé que ese chico no es del grupo, pero es importante para Vicky, y ella es nuestra amiga…

Las palabras de Carol hacen que la rabia de Iván aumente. No soporta que ese chico sea importante para Vicky, lo mata verlo cerca de ella. Siente que le hierve la sangre y no puede controlarse.
Durante la comida Iván no puede quitarle los ojos de encima a Vicky, está con Dani, se la ve contenta, ríe todo el tiempo… y él no puede evitar desear con toda su fuerza ser él quien la hace reír, quien la hace feliz.

Cuando terminan de comer Vicky le propone a Dani dar un paseo por el Internado, así podrán hablar un rato a solas y también servirá para que conozca un poco más el lugar. Pasan por delante de la mesa del grupo, todos los miran, pero ellos pasan sin prestarles atención. Vicky está muy molesta con todos, no solo con Iván, ya que el resto no hizo nada al respecto ni nadie se molestó en pedirle que no se fuera de la mesa.

Carol: Ey parejita, donde vais?
Vicky: Carol no digas tonterías, no somos… no terminó la frase cuando Dani contestó.
Dani: Soy muy afortunado, voy a dar una vuelta con una preciosidad que me va a enseñar un poco esto. Con ella a mi lado acabaré siendo la envidia de todos.

Iván se muerde el labio y aprieta fuerte los puños, trata de controlarse para no levantarse y partirle la boca a ese idiota allí mismo. Piensa en que excusa poner para evitar que se vaya de allí con Vicky, pero no se le ocurre ninguna. Tiene que dejarlos ir, pero piensa en la forma de hablar con Vicky a solas y cuanto antes, no puede dejar pasar más tiempo, en la primera oportunidad que tenga de estar con ella irá a buscarla.

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